domingo, 17 de junio de 2007

Todos contra ETA



Viene bien recordar que sentimos, que dijimos, que opinamos en su momento. Esto de dejar tu huella en la red, permite retomar artículos anteriores. Alguien me comentó en su momento: escribe aquello de lo que nunca tengas que arrepentirte. En ello estoy aunque resulte difícil porque las circunstancias van cambiando y el termómetro de la actualidad te puede inclinar hacia un lado u otro de la balanza, de los pros y de los contras.

He releído mis impresiones sobre el inicio de las negociaciones con ETA. Mi percepción de entonces, sigue en pie. Con quien no abandona las armas, no vale ninguna negociación. Llevamos tantos años de sangría a cuenta de este grupo armado, que cuando alguien viene a ponerse conciliador me enfado. Sí, y como yo, muchos otros, que en Bilbao han salido a la calle para pedir que no se vuelva a la lucha armada, que cesen de una vez las hostilidades a una ciudadanía indefensa.

Miren que es arriesgado opinar, pero desde mi piel de cristiana estoy segura que no se puede defender con las armas, aquello que se puede votar en las urnas. Por eso creo que ETA es un grupo mafioso que, extorsiona, condiciona, roba, asesina y lo hace bajo el amparo de un nacionalismo excluyente. Ellos quieren imponer sus condiciones al resto de la sociedad vasca, como si los otros no tuvieran el menor derecho a defender sus propias convicciones. La democracia en ocasiones se queda indefensa frente a estos terroristas de palabra y obra. Se dan cambios de siglas para seguir gobernando municipios y conspirando contra el Estado. Y el Estado sigue con su maquinaria de una justicia lenta, lentísima frente a la rapidez de los delincuentes. ¿Cabe otro término o vocablo?. Para mí, no.

El obispo de San Sebastián, Juan María Uriarte, habla ya de totalitarismo por parte del grupo armado. Y no olvidemos que sigue en pie la instrucción pastoral sobre el terrorismo publicada por la Conferencia Episcopal. Cada vez somos más quienes pensamos de la misma manera. Desde el momento que la gente de bien se manifiesta para que se cumplan íntegras las penas y no se llega al absurdo de convivir asesinos y víctimas, el mensaje es claro y rotundo. No se negocia si no hay abandono de las armas. Cuando se busca una solución no se hace escondiendo debajo de la mesa las pistolas.

Hoy la vicepresidenta del gobierno ha explicado: vamos a sumar, no a dividir. Es bueno que Rajoy acepte estar del lado del Gobierno, porque es una manera de situar a toda la sociedad frente a ETA. La vuelta al Pacto Antiterrorista es el mejor aval que puede tener el Gobierno para llegar a un posible proceso político que, deberá estar refrendado por las urnas. Lo demás es “agua con azucarillos”.

1 comentario:

  1. Existe la crítica que le han hecho a Zerolo sobre sus declaraciones en donde le ha traicionado el subconsciente y ha dicho dirigiéndose a ETA:...no es momento de hacer atentados...

    Claro que "no es momento", pero se entiende que el "momento" debe ser en otra oportunidad más favorable para ganar votos. Ahora con las Generales dentro de poco, si empiezan los petardos etarras se descubrirá el chasco del "dialogo zapaterino".

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