lunes, 20 de agosto de 2007

Media luna y el Príncipe de Asturias de los deportes


La película que hoy comento merece la atención de quienes por encima de modas comerciales se basan en historias que llegan al corazón. La cartelera resume el argumento: Mamo, un anciano músico kurdo, ha obtenido permiso para actuar, tras 35 años, en el Kurdistán iraquí. Con un amigo, recogerán en un autobús a sus diez hijos músicos repartidos en distintos pueblos del Kurdistán iraní. Mamo no hará caso de la premonición de uno de ellos de que algo malo ocurrirá antes de la siguiente luna llena. Junto a Hesho, una cantante exiliada en las montañas porque en Irán está prohibido que las mujeres canten delante de los hombres, inician un viaje lleno de sobresaltos

Dejemos estas líneas para que quien desee pase a ver la película, tiene una excelente fotografía y la acompaña la música del Kurdistán. Es un canto al país inexistente con más de 40 millones de kurdos repartidos por el mundo, la mayoría en Irán, Iraq, Turquía y Siria, que están unidos por la música étnica y los vínculos de su etnia, una de las mayores sin Estado.

Pero yo quiero aprovechar esta película para hablar de un acontecimiento también interesante. La Asociación Mensajero de la Paz, que presentó la candidatura al Premio Príncipe de Asturias del Deporte de la Selección Nacional Iraquí de Fútbol, ha solicitado adhesiones a la misma a diversas personalidades, colaboradores, amigos , así como a la población en general.

La Selección Iraquí de Fútbol, un equipo multi-étnico formado por árabes y kurdos, sunníes y chiíes, fue la ganadora de la última edición de la Copa de Asia. Una victoria muy meritoria teniendo en cuenta falta de medios y recursos que ha debido soportar en estos años y las tragedias personales que han vivido todos los miembros del equipo.

Pero el principal mérito de la Asociación es el que trasciende lo meramente futbolístico, mostrando -en Palabras del Padre Ángel , Presidente y Fundador de la Ong- lo más noble y humano del Deporte y siendo un ejemplo para su país y para todo el mundo, de cómo la cooperación y el entendimiento entre todos, a pesar de las diferencias, es primordial para lograr el éxito de nuestras acciones?.

Su triunfo, celebrado por todos los iraquíes, sin importar facciones políticas, diferencias étnicas o discrepancias religiosas, supuso una tregua espontánea y jubilosa en el clima de guerra civil que vive Iraq.

También todos los hombres de buena voluntad en el mundo entero se alegraron con el alborozo pacífico, ilusionado y orgulloso de los iraquíes. Hasta Su Santidad Benedicto XVI dijo: Como tantas veces lloré por los iraquíes, en esta ocasión me alegro con ellos.

La Asociación Mensajeros de la Paz cree que el Premio Príncipe de Asturias del Deporte a la Selección Iraquí de Fútbol, puede ser un importante apoyo moral a todo un pueblo que lucha, en una muy difícil situación, por la normalización de su vida y la pacificación de su tierra.

Quien quiera adherirse a esta candidatura sólo tiene que dirijirse info@fpa.es. Para más información se puede contactar con http://correo13.terra.es/cp/ps/Mail/.

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